martes, 17 de noviembre de 2009

Casualidad o causalidad.

"Si vivimos en un desorden cósmico, donde los acontecimientos siguen la única ley de la casualidad, ¿para qué preocuparse por nada?"
"Ante los fracasos, jamás hay responsabilidad personal: la vida cruel y la casualidad son los culpables de la situación, y la conciencia humana se enquista más y más en la disculpa de la impotencia ante el destino."

http://www.nueva-acropolis.es/FondoCultural/Sociologia/Sociologia9.htm

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Cuando queremos que a alguien, algo le vaya bien solemos utilizar la expresión: "Buena suerte". Y bien, ¿a qué nos referimos?
¿Suerte porque todo son casualidades y el azar eligirá el futuro que te corresponde o suerte porque el destino te suele pillar totalmente desprevenido y las causas por las que suceden las cosas son tan desconocidas y enigmáticas que sólo esperamos un buen resultado?

Es decir... ¿suerte por qué te puede tocar cualquier cosa, o suerte porque ojalá lo que ya te vaya a tocar sea bueno o malo?

¿Casualidades o causalidades?

Yo creo que hay algo que coloca las cosas en su sitio, es un conjunto de casualidades ordenadas. Quiero pensar que el tiempo coloca a cada uno en su lugar, en el sitio que debe estar, inexplicablemente cada uno tenemos una vida totalmente distinta. Debemos ser autosuficientes y responsables con nuestros actos, no hablo de carma, ni de hacer el bien para recibir el bien, hablo simplemente de intentar seguir tu vida de casualidades que causan más casualidades unidas, que a su vez son causantes de otras... No sé, es un modo optimista en su medida, de sacar fuerzas de uno mismo para saber que si algo va muy mal, no tardará en ir bien y que lo descolocado se ordena y que ya me tocará a mí. Y es curioso ver como utilizamos estos pretextos para animar al resto, desde un punto de vista ajeno. En el momento de hablar de uno mismo nos percatamos que sólo sabemos disfrutar de eso que llamamos felicidad poquísimo tiempo, ya que la misma felicidad se busca problemas: el problema de que se acabe, el problema de que sea realmente lo que buscas. El problema del problema, el problema de la solución, el problema de no saber siquiera si es un problema... y seguiría.

Está bien que mi camino ya esté marcado, también está bien que todo este dictado por el irremediable azar. Pero de todas formas... ¿eso cambia algo? Si todo es casualidad... ¿la casualidad de que yo me deje llevar está dada por otras casualidades? ¿O que yo me deje llevar implica que ya se daba por consabido que yo me iba a plantear "que ocurriría si..." y simplemente estoy siguiendo el camino que me tocó seguir?


Y tengo tantas cosas que explotar de repente que me he quedado vacía: qué problema, ¿no?
No tengo respuestas.

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